- De acuerdo al Colegio de Contadores, el ajuste tiene la finalidad de proteger el poder adquisitivo de los contribuyentes.
La Cámara de Diputados aprobó una iniciativa de Ley de Ingresos para 2018 que contempla 43 mil 291 millones de pesos más que la versión propuesta por la Secretaría de Hacienda en septiembre pasado. Esto para apoyar en el esfuerzo de reconstrucción tras los huracanes y los terremotos vividos por nuestro país el 7 y el 19 de septiembre.
Una de las modificaciones contempladas en ésta es un ajuste del impuesto sobre la renta (ISR) fundamentada en el artículo 152 de la Ley del ISR, que ya contemplaba que este impuesto debería ser ajustado si la inflación acumulada alcanza el 10%. Esto, aunado a los recursos adicionales contemplados por los diputados, llevó a muchos a pensar que el ajuste de ISR haría que las personas físicas tuvieran que pagar más impuestos sobre sus ingresos. Como ejemplo está el diputado de Morena Vidal Llerenas, quien dijo desde la tribuna que los contribuyentes pagarían más impuestos por la actualización.
Sin embargo, de acuerdo al Dr. José Manuel Velderrain, presidente de la Comisión de Investigación Fiscal del Colegio de Contadores Públicos de México, la Ley contempla el ajuste de ISR para cuidar el poder adquisitivo de los contribuyentes, en especial de los que menos ganan. “Muchos contribuyentes cambiarán de posición en la tabla de ISR, con lo que les aplicará una menor tasa”, dijo.
El ajuste se realiza aplicando un factor obtenido de dividir el índice nacional de precios al consumidor del mes inmediato anterior al más reciente del periodo (o sea el de septiembre) entre el índice de precios correspondiente al último mes que se utilizó en el cálculo de la última actualización (o sea diciembre de 2013). El artículo 17 dice que el SAT deberá hacer este cálculo y publicarlo en el Diario Oficial de la Federación. El ajuste entrará en vigor en enero de 2018.