- Arturo Herrera Gutiérrez detalló a grandes rasgos cuáles serán los puntos fundamentales que se considerarán para generar mayores rendimientos para las cuentas de los trabajadores
Entre los grandes retos que enfrentarán las autoridades hacendarias del próximo gobierno, encabezado por Andrés Manuel López Obrador, destaca la revisión del sistema de pensiones mexicano, con el fin de mejorar su competitividad.
Durante los trabajos de la Tercera Convención de Administradoras de Fondos de Ahorro para el Retiro (Afores), el futuro subsecretario de Hacienda y Crédito Público, Arturo Herrera Gutiérrez, detalló a grandes rasgos cuáles serán los puntos fundamentales que se considerarán para generar mayores rendimientos para las cuentas de los trabajadores, en el próximo sexenio.
Los puntos esenciales de lo que incluso podría traducirse en algún momento de la siguiente administración en una reforma al Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR) son los siguientes:
1) Régimen de inversión:
Como sabemos, la autoridad reguladora del sistema de pensiones en México definió desde el inicio de la modalidad de cuentas individuales en el SAR un régimen de inversión, que consiste en limitar el porcentaje de inversiones de los recursos de los trabajadores en determinados mercados e instrumentos, con el objetivo de disminuir la exposición al riesgo de estos recursos.
La medida tiene sus pros y sus contras; en efecto, limitar las acciones de inversión de las Afores, evitar que sean indiscriminadas, tiene la ventaja de que modera los riesgos para los trabajadores, sobre todo debido al bajo nivel de cultura financiera que existe en el país.
Sin embargo, también dicha medida evita que en determinados momentos los mismos trabajadores tengan ganancias mayores a las que tuvieron, debido a que sus recursos fueron invertidos en instrumentos menos rentables.
También es importante señalar que muchas Afores no ejercen el límite máximo de inversión que asigna la autoridad, lo que se traduce en un problema de subejercicio.
2) Comisiones:
Aunque las comisiones que cobran actualmente las Afores han bajado, es un hecho que éstas pueden bajar más todavía. Actualmente el promedio se ubica en 1.18 por ciento y el promedio mundial está por debajo del punto porcentual. Hay margen para que las comisiones bajen, ni duda cabe.
De hecho, la presente administración tiene como objetivo que las comisiones se coloquen sobre niveles de 1% al final de la misma, algo que ya posiblemente no se concretará sobre todo en este año de transición en el que el poder persuasivo del agente regulador pierde fuerza y posiblemente las Afore vayan a presentar propuestas moderadas de disminución de comisiones en el proceso que iniciará en breve.
Las comisiones que cobran las Afores pueden y deben bajar, sobre todo porque en un mercado en expansión, en el que las Afores cada vez reciben más y más dinero por el simple hecho de que son mucho más los trabajadores que cotizan y se mantienen vigentes respecto a los que se jubilan, hay mucho margen.
3) El tema crucial de las aportaciones:
En realidad fue tocado muy vagamente por el próximo funcionario hacendario, lo que resulta noticioso dada la relevancia que tiene para el sistema de pensiones y para el país en general este asunto, el de las bajísimas aportaciones que hacen los trabajadores mexicanos a su cuenta de ahorro para el retiro.
Como sabemos, los trabajadores que cotizan al IMSS aportan solamente 6.5 por ciento de su salario, una de las tasas más bajas en el mundo, y la más baja para los países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), toda vez que el promedio en este organismo es de 17 por ciento.
En realidad, este último tema es el más relevante para considerar una verdadera reforma al sistema de pensiones, pero la vaguedad con la que se abordó hace suponer que todavía es mucho lo que debe analizarse entre los funcionarios, toda vez que en México los niveles promedio de ingresos son bajos, muy bajos.
La convención de Afores continuará, con temas relevantes para la industria, aunque lo que más ha destacado es el interés por conocer el punto de vista de quienes estarán al frente de la administración pública federal a partir del 1 de diciembre.